1- La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?
3- Las grandes almas tienen voluntades; las débiles tan solo deseos.
4- El sabio puede sentarse en un hormiguero, pero sólo el necio se queda sentado en él.
5- Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta.
6- Si quieres que algo se haga, encárgaselo a una persona ocupada.
7- Es más fácil variar el curso de un río que el carácter de un hombre.
8- Nunca se pierden los años que se quita una mujer, van a parar a cualquiera de sus amigas.
11-Jamás se desvía uno tan lejos como cuando cree conocer el camino.
12-El momento elegido por el azar vale siempre más que el momento elegido por nosotros mismos.
15-Antes de iniciar la labor de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu propia casa.
16-El que se pone de puntillas no puede sostenerse derecho.
17-Todos los hombres son sabios; unos antes, los otros, después.
18-La lengua resiste porque es blanda; los dientes ceden porque son duros.
19-El trabajo del pensamiento se parece a la perforación de un pozo: el agua es turbia al principio, más luego se clarifica.
20-Cada paso que da el zorro le acerca más a la peletería.
21-La tinta más pobre de color vale más que la mejor memoria.
22-Todos los ríos van al mar, pero el mar no se desborda.
23-Un pájaro no canta porque tenga una respuesta. Canta porque tiene una canción.