En el derecho Canónico recibe este nombre un funcionario de la Curia romana que forma parte de un colegio encargado de abreviar las suplicas y confeccionar las minutas de la bulas.
Forma parte asimismo de un tribunal que resuelve las dudas que pueden surgir en la interpretación de las bulas y decretos. En las nunciaturas apostólicas existe también un abreviador nombrado por el Papa, a propuesta de los respectivos gobiernos.