Al amanecer, un monje mendicante dejo el monasterio para ir a mendigar su alimento. Iba tranquilamente caminando cuando vio que un terrateniente golpeaba cruelmente a uno de sus sirvientes. El monje, lleno de compasion corrio hasta ei terrateniente e intercedio por el que estaba siendo tan severamente castigado. El terrateniente la emprendio entonces con el pacifico monje y le propino tal paliza que lo dejo medio muerto.
Un par de horas despues, otros monjes del monasterio lo hallaron en tan lamentable estado y lo condujeron prestos a su celda en el monasterio.. Uno de los monjes le estuvo curando las heridas con mucho carino. Cuando el herido se reanimo, le dio leche y le pregunto:
-Herman, Mme concoces?
-Claro que to conozco, hermano -dijo con un hilo de voz el herido-. Aquel que me golpe6, me esta ahora cuidando y alimentando con leche.
El Maestro dice: Asi es el caracter de unidad para un iluminado.