El guru y el discipulo estaban departiendo sobre cuestiones misticas. El maestro concluyo con la entrevista diciendole:
-Todo lo que existe es Dios.
El discipulo no entendio la verdadera naturaleza de las palabras de su mentor. Salio de la casa y comenzo a caminar por una callejuela. De subito, vio frente a el un elefante que venia en direccion contraria, ocupando toda la calle. El jovencito que conducia al animal, grito avisando:
-Eh, oiga, apartese, dejenos pasar!
Pero el discipulo, inmutable, se dijo: "Yo soy Dios y el elefante es Dios, asi que como puede tener miedo Dios de si mismo? Razonando de este modo evito apartarse. El elefante llego hasta el, lo agarro con la trompa y lo lanzo al tejado de una casa, rompiendole varios huesos. Semanas despues, repuesto de sus heridas, el discipulo acudio al mentor y se lamento de lo sucedido. El guru replico:
-De acuerdo, tu eres Dios y el elefante es Dios. Pero Dios, en la forma del muchacho que conducia el elefante, te aviso para que dejaras el paso libre. Por que no hiciste caso de la advertencia de Dios?
El Maestro dice: Afila el discernimiento. No tomes la soga por una serpiente, ni la serpiente por una soga.