1- El verdadero amor es como los espíritus: todos hablan de ellos, pero pocos los han visto.
2- Si juzgamos el amor por la mayor parte de sus efectos, se parece más al odio que a la amistad.
3- Es necesario tener tanta discreción para dar consejos como docilidad para recibirlos.
4- La intención de no engañar nunca nos expone a ser engañados muchas veces.
5- Si tuviésemos suficiente voluntad casi siempre tendríamos medios suficientes.
6- Tres clases hay de ignorancia: no saber lo que debiera saberse, saber mal lo que se sabe, y saber lo que no debiera saberse.
7- No hay disfraz que pueda largo tiempo ocultar el amor donde lo hay, ni fingirlo donde no lo hay.
8- Lo que hace que los amantes no se aburran nunca de estar juntos es que se pasan el tiempo hablando siempre de sí mismos.
9- Nuestra envidia dura siempre más que la dicha de aquellos que envidiamos.
10-Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera.
11-Cuanto más se ama a un amante, más cerca se está de odiarle.
12-Nunca se tiene la libertad de amar o de dejar de amar.
13-La ausencia disminuye las pequeñas pasiones y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogueras.
14-Si quieres tener enemigos, supera a tus amigos; si quieres tener amigos, deja que tus amigos te superen.
15-Es muy difícil que dos que ya no se aman, riñan de verdad.
16-Es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos.
17-Los espíritus mediocres suelen condenar todo aquello que está fuera de su alcance.
18-A los viejos les gusta dar buenos consejos, para consolarse de no poder dar malos ejemplos.
20-La confianza sirve en las conversaciones más que el ingenio.
21-Lo que hace que la mayoría de las mujeres sean tan poco sensibles a la amistad es que la encuentran insípida luego de haber probado el gusto del amor.
22-La filosofía triunfa con facilidad sobre las desventuras pasadas y futuras, pero las desventuras presentes triunfan sobre la filosofía.
24-Amamos siempre a los que nos admiran, pero no siempre a los que admiramos.
25-Como pretendes que otro guarde tu secreto si tú mismo, al confiárselo, no los has sabido guardar.
26-La vejez es un tirano que prohíbe, bajo pena de muerte, todos los placeres de la juventud.
27-Para tener éxito debemos hacer todo lo posible por parecer exitosos.
28-Cuando nuestro odio es demasiado profundo, nos coloca por debajo de aquellos a quienes odiamos.
29-La gratitud de muchos no es más que la secreta esperanza de recibir beneficios nuevos y mayores.
30-El medio más fácil para ser engañado es creerse más listo que los demás.
31-Nunca somos tan felices ni tan infelices como pensamos.
32-La verdadera elocuencia consiste en no decir más de lo que es preciso.
33-Es más fácil conocer al hombre en general que a un hombre en particular.
34-Las personas afortunadas se corrigen poco: Creen tener siempre razón mientras la fortuna sostiene su mala conducta.
36-Todos poseemos suficiente fortaleza para soportar la desdicha ajena.
37-Aunque los hombres se jacten de sus grandes acciones, muchas veces no son el resultado de un gran designio, sino puro efecto del azar.
40-El daño que hacemos no nos trae tantas persecuciones y odios como nuestras buenas cualidades.
41-No se debe juzgar a un hombre por sus cualidades, sino por el uso que hace de ellas.
43-El mejor medio de conservar los amigos es no pedirles ni deberles nada.
44-Hay poca gente lo bastante cuerda que prefiera la censura provechosa a la alabanza traidora.
45-No hay accidente, por desgraciado que sea, del que los hombres hábiles no obtengan provecho.
46-La libre comunicación de los pensamientos y las opiniones es uno de los derechos más preciados por el hombre.
47-Es una prueba de poca amistad no darse cuenta del retraimiento de la de nuestros amigos.
49-No se desprecia a todos los que tienen vicios, pero sí a los que no tienen ninguna virtud.
50-No solemos considerar como personas de buen sentido sino a los que participan de nuestras opiniones.
51-Hablamos muy poco, excepto cuando la vanidad nos hace hablar.
52-Establecemos reglas para los demás y excepciones para nosotros.
54-La verdad no hace tanto bien en el mundo como el daño que hacen sus apariencias.
55-Conocer las cosas que lo hacen a uno desgraciado, ya es una especie de felicidad.
56-El verdadero valor consiste en hacer uno sin testigos lo que sería capaz de hacer ante todo el mundo.
57-El silencio es el partido más seguro para el que desconfía de sí mismo.
58-La inteligencia no podría representar mucho tiempo el papel del corazón.
59-Si en los hombres no aparece el lado ridículo, es que no lo hemos buscado bien.
60-Perdonamos fácilmente a nuestros amigos los defectos en que nada nos afectan.
61-Es más necesario estudiar a los hombres que a los libros.
62-Confesamos nuestros pequeños defectos para persuadirnos de que no tenemos otros mayores.
63-Cuando no se encuentra descanso en uno mismo, es inútil buscarlo en otra parte.
64-Todo el mundo se queja de no tener memoria y nadie se queja de no tener criterio.
65-Solemos perdonar a los que nos aburren, pero no perdonamos a los que aburrimos.
67-Para hacerse una posición en el mundo, es preciso hacer todo lo posible para hacer creer que ya se tiene.
68-Nunca otra cosa damos con tanta liberalidad como nuestros consejos.
69-Los apellidos famosos, en lugar de enaltecer, rebajan a quienes no saben llevarlos.
70-La adulación es una moneda falsa que tiene curso gracias sólo a nuestra vanidad.