1877-1925. Filósofo y psicólogo argentino.
1- Los hombres y pueblos en decadencia viven acordándose de dónde vienen; los hombres geniales y pueblos fuertes sólo necesitan saber a dónde van.
2- Es hermoso que los padres lleguen a ser amigos de sus hijos, desvaneciéndoles todo temor, pero inspirándoles un gran respeto.
3- Enseñemos a perdonar; pero enseñemos también a no ofender. Sería más eficiente.
4- No se nace joven, hay que adquirir la juventud. Y sin un ideal, no se adquiere.
5- Los más rezan con los mismos labios que usan para mentir.
6- A los hombres fuertes les pasa lo que a los barriletes; se elevan cuando es mayor el viento que se opone a su ascenso.
7- Admitamos que la primera vez se ofende por ignorancia; pero creamos que la segunda suele ser por villanía.
8- El hombre que ha perdido la aptitud de borrar sus odios está viejo, irreparablemente.
9- La vida humana representa, la mayor parte de las veces, una ecuación entre el pasado y el futuro.
10-Los que se quejan de la forma como rebota la pelota, son aquellos que no la saben golpear.
11-La curiosidad intelectual es la negación de todos los dogmas y la fuerza motriz del libre examen.
12-La imaginación y la experiencia van de la mano. Solas no andan.